Rethink Robotics, empresa fabricante de robots colaborativos con sede en Boston, ha anunciado esta semana el cese de operaciones. La noticia ha sido en gran medida inesperada ya que Rethink Robotics ha sido siempre considerado un modelo del nuevo paradigma de la automatización industrial. Y es que Rethink ha sido pionera en robótica colaborativa.
La empresa fue fundada hace 10 años gracias a los 150 millones de dólares recaudados por varios inversores. Rethink Robotics ofrecía la idea innovadora de acercar los robots industriales a los humanos con el fin de que pudieran trabajar conjuntamente sin necesidad de vallados. No obstante, Rethink se ha quedado sin fuerzas debido a que las ventas no han alcanzado los objetivos de la compañía y de sus inversores.
Hace un año ya se podía escuchar que existía una creciente frustración entre los distribuidores de Rethink. Incluso que algunos se habían ido a prestar sus servicios a Universal Robots.
Recuerdo que hace un tiempo atrás en una charla de robótica colaborativa, la cual dejo claro que no estaba organizada por un fabricante de robots colaborativos si no por una universidad, ya se comentó de que los robots de Rethink no estaban al nivel de sus competidores. Ya por aquel entonces me dio la sensación de que no contaban con buena fama en el mundo de la robótica colaborativa, y visto el triste final de la empresa, no creo que en este tiempo hicieran lo posible por alcanzar a sus competidores.
Era públicamente conocido que la empresa estaba pasando por una crisis financiera, pero últimamente se hablaba de que estaba a punto cerrar su compra por un inversor. Esta compra finalmente no se ha consumado y que por tanto ha llevado a la empresa a cerrar puertas.
El cierre de la compañía no es un indicativo de que la industria de la robótica industrial este pasando por malos momentos ni mucho menos. Sin duda el cierre de Rethink se ha debido a una mala estrategia y gestión que evidentemente ha desembocado en problemas financieros.
La historia recordará a Rethink Robotics como la empresa que cambio la robótica industrial para siempre ya que demostraron como los robots pueden trabajar codo a codo con la gente.
Está claro que en la carrera hacia la industria 4.0, en especial en robótica colaborativa, los fabricantes que se quedan atrás lo acaban pagando muy caro.
Escrito por Javier López.
