Los nuevos modelos de negocio digitales apuestan por la innovación y la tecnología

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Desarrollar una cultura organizativa innovadora capaz de adaptarse con agilidad a los cambios del mercado implementando las soluciones tecnológicas que más se ajustan a sus necesidades además de contar con capital humano alineado con la estrategia de negocio, permite a las compañías ofrecer una propuesta de valor diferenciadora en el contexto actual.

Este ha sido el hilo conductor del encuentro digital “Innovación y tecnología, la clave para transformar las compañías e impulsar una propuesta de valor diferenciadora” impulsado por ESIC y organizado por Dir&Ge, en el que se han reunido decisores de compañías representativas de diferentes sectores para analizar el valor que aporta la tecnología en su proceso de transformación.

Los directivos han coincidido en que la integración de nuevas herramientas tecnológicas solo tiene cabida si las compañías disponen de un capital humano capacitado y comprometido. En este sentido, han incidido en la importancia de ofrecer a los equipos opciones de formación personalizadas intuitivas e inclusivas adaptadas a sus necesidades, y que les aporten valor como base para garantizar una gestión eficiente del talento.

Cultura innovadora, procesos y acciones para una gestión efectiva del talento

Los nuevos modelos de negocio digitales apuestan por la innovación, la tecnología y el emprendimiento provocando un cambio de mindset en las compañías y transformando su propia organización, las dinámicas de trabajo, la gestión del talento y los estilos de liderazgo.

Alberto Moreno, Regional VP Transformation – Southern, Eastern Europe & MENA de Adecco, ha señalado que para mantener la capacidad innovadora en un entorno cambiante “las compañías deben valorar el nivel de recursos que destinan a reforzar e incrementar su posicionamiento en el mercado. La empresa que no apueste por mantener un nivel de diferenciación alto tendrá muy pocas oportunidades de supervivencia en el contexto actual”.

“Orientación, democratización y soporte son las bases para mantener un enfoque innovador” según ha apuntado Miguel Amérigo, Jefe Corporativo de I+D e Innovación de OHLA, quien ha destacado la necesidad de “contar con una visión de liderazgo que traslade de forma clara las directrices a la organización, así como la importancia de llevar la innovación a todos los miembros de la compañía facilitándoles las herramientas necesarias y garantizando un soporte adecuado que les permita innovar de manera fácil e intuitiva”.

Felipe Ynzenga, Director Empresas de ESIC Corporate Education, ha subrayado que en un contexto donde todo avanza a un ritmo acelerado, “las empresas buscan personas multitask, flexibles y adaptables y para ello es necesario que los empleados apuesten por la autoformación. Las compañías, por su parte, deben fomentar la capacitación de los equipos”. Asimismo, ha incidido en la formación de los managers como aspecto esencial para que tengan la capacidad de acompañarles en su desarrollo. “Es importante reforzar la motivación intrínseca del directivo para que fomente la cohesión del equipo, así como dotar a los líderes empresariales de visión y criterio sobre innovación o tecnologías emergentes para optimizar su toma de decisiones”.

Reestructurar el modelo de negocio para ofrecer un valor innovador implica tomar decisiones y especialmente la necesidad de apostar por perfiles tecnológicos y digitales. Julio Sánchez, Head of Innovation de Cinfa, ha incidido en la importancia de saber adecuar los procesos de innovación al ritmo del mercado. “Ajustar la innovación a los tiempos del mercado es fundamental para que las compañías puedan capitalizar las innovaciones que implementan y así, contribuir a la consecución de los objetivos empresariales”.

Por su parte, Hugo Loredo, Head of Transformation and Strategic Initiatives de eDreams, ha puesto el foco en la priorización de los objetivos de negocio para una transformación eficaz. “Sercapaces de identificar a los distintos perfiles de cliente es clave para posteriormente, analizar objetivos, orientar la inversión y priorizar proyectos y la tecnología más adecuada en este sentido”.

Innovación y tecnología: una combinación de éxito para evolucionar hacia modelos de negocio digitales integrados por equipos capacitados

Poner en marcha una transformación cultural global, de personas, de procesos, sólo es posible a través del capital humano y es imprescindible construir conceptos como la experiencia de empleado, el estilo de liderazgo y la forma de trabajar que nos define como compañía.

Los directivos han destacado que las empresas que apuestan por la formación tienen un valor diferenciador. Por ello es clave actualizar a los equipos en nuevos skills y han remarcado la importancia de incentivar la visibilidad de los perfiles innovadores poniendo en valor su esfuerzo y ofreciéndoles beneficios que no sean únicamente económicos con el fin de intentar conseguir que la motivación sea intrínseca. Además, han remarcado la predisposición de los equipos a los nuevos formatos de formación, un aspecto que las empresas deben saber aprovechar.

“Tener claro cuál es el enfoque y la visión de tu organización es la base para poder analizar hacia dónde debes evolucionar con el objetivo de impulsar un cambio cultural que facilite la consecución de los objetivos de negocio”, ha explicado Sara Pedraz, Innovation Lead – Directora de Innovación en Oncología de GSK. Por otra parte, ha aclarado que “la combinación generacional en las compañías siempre es positiva y enriquecedora, ya que el cambio de mindset no va asociado a la edad sino a un proceso mental” y ha apuntado la necesidad de “alinear los incentivos que tienen los empleados para adoptar el cambio. Si evaluamos los equipos con los indicadores de negocio tradicional el resultado podría ser dejar de fomentar la motivación al cambio”.

Antonio Díaz, Director General Evoluciona & Innovation Director de Intelcia Spain-Latam, ha destacado el valor que aporta la creación de una base de conocimiento que pueda impregnarse en toda la organización. “Ofrecer píldoras formativas de temáticas diversas, de duración breve, pero bien focalizadas o un entorno colaborativo en el que cada empleado pueda aprender en función de sus necesidades creando una base de conocimiento global, son algunas alternativas efectivas”.

Por último, los directivos han compartido las características que debe tener un plan de formación para que sea efectivo destacando la sencillez, la usabilidad, la variedad de formatos adaptados a las necesidades de cada empleado, la inclusividad o la personalización como aspectos claves de un plan de formación. Asimismo, han destacado la importancia de que la oferta formativa esté alineada con la estrategia de negocio y aporte valor tanto a nivel profesional, como a nivel individual ofreciendo la oportunidad de elegir su propia formación.

 

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